Tiempo de narraciones de termino
Escuché - veintinueve -
Escuché decir que un activista , en el tiempo adecuado , elaboraba esta proclama a la salida de bares , iglesias y casas de gobierno :
* ¿ Pasa que las sociedades enfermas producen sujetos enfermos? ¿O pasa que estos últimos tarde o temprano terminan haciendo de las suyas ? El tiempo histórico ya no da para enfrascarse en juegos de huevos o de gallinas . Un buen amigo nos dice que ya estamos en la edad para dejar de ser unos idiotas . Gestionar el caos no es cosa fácil . Aun así , no pocos indican : ¡ que ellos o la fatalidad ! Estamos por pensar que esto lo dicen más allá del gobierno de la ciudad . Estamos por pensar que lo dicen - más bien - en el escenario de una guerra .
Y pasa que ya un Pontífice explicitó que los pobres no pueden esperar , porque de hambre uno muere . Y porque de hambre uno muere, es que en este lugar intentaremos explicarnos lo que pasó Camino al Bicentenario y por qué las cosas han sido así . Ahora somos nosotros los que decimos con fuerza : con el estómago vacío no dan las tripas para subir una plegaria al cielo e idiotas son los que propagan que esto es responsabilidad de todos . ¡ Esto es falso ! . Las responsabilidades son mucho más de unos que de otros , y en estos términos deberemos responder por nuestros actos . Lo último no resulta de una figura matizada donde puedan esconderse todos aquellos que han afectado gravemente el funcionamiento del planeta so pretexto de transformar la naturaleza y producir riquezas -
Como este lugar no está pensado para ser un huevo ni una gallina , diremos que la afección del Lugar que habitamos nos ha enfermado a muchos . El proceso de muerte aparece sin retorno . Esto , a no ser que produzcamos rectificaciones serias , rápidas y efectivas . Mentir en ciertas materias es grave . Falsear en las mismas cuestiones lo es más. Es mentir a la manera de un diseño estratégico cuya consecución es el apoderamiento de los espacios políticos , del poder y quedarse luego con la mayor parte del dinero. Muchos hemos mentido y traicionado con palabras a los necesitados y seguros estamos que generalizar también es de idiotas. Así las cosas , esperamos que el tiempo y el espacio nos den una oportunidad para despertar de este sueño con síntomas de pesadilla . No desearíamos - ahora sí definitivamente - - terminar estrellados y hecho añicos.
Antes del término de este Relato , pensaremos y trabajaremos también para que nuestro sueño sea razonablemente satisfactorio . El desarrollo de esto no comporta denuncia . Menos aún es práctica de subversión . La historia que narraremos es sólo una somera constatación de los hechos . Estos no son conocidos por muchos ,y cuando otros anhelan saberlos , los documentos pronto son conducidos a la Cueva de los Ladrones ; con todos los 40 custodiando la entrada al depósito .
Sabemos parcialmente que aquí habrá que desplazar , para que como antaño y con los poetas , no seamos presos de las modernas guillotinas . La democracia gastada , que sólo puede contentarse con administrar las tendencias que operan , busca siempre deshacerse de los que pensamos que hemos equivocado el camino . Al Pequeño de Nazaret que nos da la inteligencia y la osadía , amor eterno : porque el juego que comenzamos a jugar lo jugaremos hasta llegar al final. *
Escuché , al término de la jornada , que el activista ofrecía variadas disculpas por si el inicio de la Campaña resultaba abrupto . Podía ser – comentaba - que ciertos paladares con el estómago descompuesto no siempre tragan términos amargos .
Alvaro L. Martínez Binimelis
